Catacumbas! una palabra que no sé a vosotros pero a mí, ya de por sí es una palabra que me fascina… misterio, historia, silencio … pero, en París, ¿qué son exactamente?.
Y es que, aun habiendo estado en muchas ocasiones en París, tuvo que ser hace poco cuando descubrí que realmente París es como un queso emmental francés, con grandes huecos interiores. Y es que París es una ciudad en la que se pueden pasar mucho tiempo descubriendo cada lugar, quizás para ello lo más aconsejable es alquilar alguno de los bonitos apartamentos que ofrece la ciudad para descubrir de una manera más relajada cara rincón de París.
Se dice que París tiene unos 350 kilómetros de túneles subterráneos que forman una enorme red laberíntica entre las que están las poéticamente (pero incorrectamente) llamadas catacumbas, que por cierto, no son el único lugar subterráneo visitable en París (aunque sí el más mágico), también están las grutas del Parque Montsouris Odeon y algunas zonas como Montmartre, Belleville y Ménilmontant donde también se pueden realizar «viajes históricos» al París más escondido.
No sólo a mí como, sino también a todos los que visitamos París nos fascina el visitar las catacumbas sino que tras su creación en el año 1787, las catacumbas de París, ya despertaron la curiosidad de todos, incluso Carlos X, descendieró junto a las damas de la Corte. Napoleón III también fue uno de los que no pudo resistirse a conocer el lugar.
Pero, ¿cuál es el origen de esta gigantesca red de túneles subterráneos?, la respuesta es simple: la piedra. Desde la época galo-romana, en la que los parisinos escogieron ésta tierra para crear sus hogares. Las catacumbas de París son una parte de las antiguas canteras que se extienden por debajo de la mayor parte de la ciudad.
Por otro lado, el nombre de catacumbas, en el caso de la ciudad de París, es abusivo. En realidad, podríamos decir que es más bien un osario. De hecho, es aquí donde se almacenaron los huesos de -según explica el guía- 6 millones de personas después de que se decidiera vaciar los cementerios y los restos humanos de las iglesias de París en el año 1786. También se pueden encontrar fósiles y conchas marinas que nos enseñan que París estuvo bajo el mar mucho tiempo atrás. No obstante todo ésto está explicado a la entrada de las Catacumbas donde hay una exposición histórica del lugar.
Hoy en día, cualquier persona puede visitar las catacumbas situadas en Denfert-Rochereau. Aunque éstas son sólo una pequeña parte de los 350 km de galerías que se dice que tiene París bajo sus pies … y aquí es donde comienza la aventura. Las catacumbas tienen su parte de misterio y una vida paralela. En la década de los 70’s, la gente descendía a las catacumbas sin control y como una práctica común a pesar de estar prohibido y ser peligroso.
Desde la década de 1980, las autoridades estaban preocupadas pensando en que abajo se podrían estar creando grupos sectarios, venta de drogas etc, así que se hizo una apuesta para ver las Catacumbas como una forma de arte, fue cuando todo lo que hoy visitamos empezó a tomar forma. Se rediseñaron y decoraron las estancias, se pusieron esculturas (entre las que están las ciudades y castillos tallados en la roca, junto a gárgolas), pinturas y frescos.
A partir de los años 90 para evitar problemas con los el vandalismo y a una plaga de ratas que podría propagar enfermedades, se hormigonó la entrada a las galerías dejando sólo unas pocas entradas disponibles desde las que se ejercería un control.
Desafortunadamente, el acceso a las catacumbas «no oficiales», se tiene que solicitar con mucha antelación y no se le da a todo el mundo, se sabe que se recorren caminando cientos de metros con una antorcha en la mano. Hay tramos en los que incluso hay que gatear, pasar a través de los respiraderos, donde hay tramos en los que hay que cruzar galerías inundadas en las que el agua llega hasta la cintura … honestamente, me quedo con las oficiales.
Las Catacumbas visitables de París están a unos 20 metros de profundidad, incluso más abajo que el metro y el alcantarillado. Hay aproximadamente 12 grados de temperatura y en el lugar reina el silencio. La bajada hasta la zona que se visita es como la entrada a otro mundo donde -a parte de la exposición histórica- se pueden ver antiguos refugios antiaéreos, antiguos bunkers alemanes, osarios y fuentes. Algunas de las estancias tienen más de dos siglos de historia, como la tumba de Philibert Aspairt que está datada en 1793.
Entre las áreas más notables y bonitas están la denominada sala Z y sus bóvedas, un lugar inspirado por el arte románico. Otro pintoresco lugar es el llamado como «la playa«, que se trata de una habitación construida en los últimos veinte años, donde el suelo es de arena. Por último, no hay que olvidarse de «el castillo«, una amplia habitación decorada con gárgolas y que tiene una mesa redonda rodeada de bancos donde hay gran castillo de miniatura tallado en la roca y una lámpara de araña de hierro forjado colocada en el centro.
Para visitar las catacumbas oficiales de París, lo más importante es ir a primerísima hora e incluso 1hr antes de su apertura si no quieres esperar (como mi caso) unas 3:30 horas. Las Catacumbas «oficiales» de París están en 1 avenue du Colonel Henri Rol- Tanguy (XIV) y abren de martes a domingo de 10:00-17:00, siendo a las 16:00 el último pase. Cuesta 8€ entrar y está limitado a pequeños grupos de 20 personas cada 5 minutos más o menos, para evitar aglomeraciones.
Os resumo mi visita con un vídeo de 1:30 minutos para enseñaros lo más significativo:
Lo sorprendente es que cuando sales de las Catacumbas, estás a más de un kilómetro de donde entraste, saliendo de la puerta de una casa en una calle alejada, y eso que éstas Catacumbas son una pequeña parte de las catacumbas que hoy en día se puede visitar.
Brutal. Ya te vale Alfonso. Me toca ir a París a verlo. Esto no me lo pierdo por nada del mundo. Gracias por descubrirnos este lugar
jejeje … es una de las cosas que dejamos de visitar cada vez que vamos a Paris.
Tampoco había oído hablar del lugar antes,
Qué tétrico y antojable se ve. Está perfecto para escena de película de zombies jejeje
Es un lugar de película, desde luego 🙂
Nosotros solo estuvimos unas horas en París y nos quedamos con muchas ganas de visitarlas. Deben ser impresionantes. Gracias por compartirlo y acercarnos este pequeño rincón.
Saludos Belén y Ramón
Es un lugar que bien merece una visita …
No tenía ni idea de que existía esto en París.
Anda que no tiene que molar pasearse por las catacumbas «no oficiales»!! Como aventureros, jejeje.
Apuntado queda para la próxima visita a París!!
Un abrazo!
es el típico sitio que dejamos de lado cuando vamos a París, pero es verdaderamente un lugar increíble.
No he estado e igual dentro de un mes voy a París, así que me lo apunto.
Saludos viajeros
El LoBo Bobo
Bueno, yo hasta mi cuarta visita no lo he visitado …
Ufff!! Es completamente escalofriante este sitio. Nunca he estado pero tiene que ser impresionante visitarlo…
Siempre que leo algo sobre las catacumbas de París me viene a la cabeza una obra que toqué con la banda hace unos años, Cuadros de una Exposición. Ahí el compositor describe con la música un cuadro de unas catacumbas, no sé si serán las de París pero desde luego que pega la música jejeje. Te pondré el enlace en twitter a ver si opinas lo mismo 🙂
Un saludo!!!
Impresionante y después de ver el vídeo de youtube … «sobrecogedor»
Qué pasada! Y mira que estuve varias veces en Paris.. ¡para la proxima!
Un beso
Lara
No te lo puedes perder tu próxima vez en París-
Cuando estuve en París no tuve tiempo de visitar las catacumbas. Tomo nota para la próxima visita. Un saludo!
Es una gran visita en París. Gracias por tu comentario.