Ocasionalmente, el sol reúne la fuerza suficiente para abrirse paso a través de las grises nubes que se ciernen sobre este tramo de la costa de Lancashire. Ocasionalmente, pero no con frecuencia, la luz ilumina Blackpool, una ciudad que parece atrapada en el tiempo, una ciudad que un día fue el icono vacacional para los Británicos. Una playa de arena fina sobre la que pasean burros, teatros, parques de atracciones y muelles deleitan a los visitantes pero : ¿qué hacer en Blackpool? .

Hoy en día, Blackpool no es un destino que atraiga a emocionados viajeros de todas partes, tal y como sucedía hace poco más de 100 años, cuando la élite del país y las multitudes viajaban hasta Blackpool. Pero, a pesar de algo tan trivial como el clima en ésta parte del norte de Inglaterra, hay un extraño y “casposo” atractivo que hacen de ésta ciudad de vacaciones, algo único.

La ciudad en sí tiene una larga historia desde hace siglos, una historia que contribuyó (junto a sus playas) al gran éxito de Blackpool durante más de un siglo: la llegada de las carreteras y el tren, así como las inversiones de las clases altas en la ciudad han sido la pieza clave para todo lo que fue y lo que nos encontramos hoy en día en Blackpool.

Hace un tiempo y tras haber visitado otros destinos de ocio y vacaciones en Inglaterra, como Bournemouth, Brighton, Margate y Clacton-on-sea entre otros, decidimos viajar hasta Blackpool para conocer algo más sobre esa ciudad de la que los ingleses dicen que Benidorm se copió.

Aunque fuese así hace un siglo, hoy en día nadie viene a Blackpool buscando glamour, esplendor y asombro. Pero de igual manera nadie se va decepcionado. Blackpool hace exactamente lo que dicen sus campañas publicitarias, entretener a todos, aunque sea una ciudad en decadencia, pasado de moda, salvaje, cutre pero completamente divino, quizá por eso, millones de personas todavía acuden hasta Blackpool cada año.

La entrada a la ciudad está ambientada al más puro estilo de parque temático, parece que estás entrando a un parque de atracciones más que a una ciudad. Una vez dentro de vislumbra una aparente tristeza en sus calles y edificios, así como cierta mugre, algo que contrasta con la magia de sus luces y atracciones.

Supongo que igual que a mí, todos los visitantes se asombran con la iluminación y los láseres de la ciudad. Al igual que chillan y aplauden de emoción con las montañas rusas y atracciones para todas las edades que se agolpan en el paseo marítimo de Blackpool. De hecho una vez me comentó un buen amigo inglés que : “ningún niño puede pasar una semana en Blackpool y no regresar en algún momento de su vida”.

Y es que parece no importar lo viejo que todo parezca en Blackpool, todo el paseo marítimo es una color y diversión. Puede ser que incluso Blackpool no sea un lugar para aquellos cuyo ritmo de vida no sea muy diferente al de los burros en la playa, pero siempre hay un rincón para todos, desde el Cabaret hasta el Tower Ballroom.

Blackpool nunca ha tratado de ser algo que no es. Es barato y de mal gusto (cutre y casposo), así como un lugar que parece despreocupado y amigable para los niños, pero peligroso y salvaje. Algo para todos y todo para alguien.
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ATRACCIONES DE BLACKPOOL

Blackpool tiene atracciones asombrosas e incluso históricas que son un gran reflejo de lo que fue y pudo ser. Voy a nombrarlas por fecha de apertura, para que os hagáis una idea de que no es tan sólo una atracción sino que es parte de la historia vacacional del Reino Unido.

  • North Pier (1863): El más septentrional de los tres muelles de Blackpool, incluye una pequeña galería comercial juegos recreativos, el bar “Merrie England”, un pequeño tranvía y el Teatro North Pier.
  • Central Pier (1868): El muelle central incluye una gran noria, atracciones, juegos recreativos, tiendas y un gran centro de entretenimiento familiar.
  • Heritage Tramway (1885): Sorprendentemente varios tranvías restaurados continúan operando a lo largo del paseo marítimo. Subirse a uno de los tranvías eléctricos más antiguos del mundo a lo largo del paseo marítimo de Blackpool es un gran experiencia.
  • South Pier (1893): El muelle más al sur de Blackpool alberga una sala de juegos, un bar familiar, atracciones y la zona de “adrenalina” con el Sky Swing (un columpio gigante) y el Sky Screamer.
  • Torre de Blackpool (1894): Inspirada en la Torre Eiffel en París en Francia, ésta mide 158 metros de altura y en lo alto hay no sólo una impresionante vista sino un recorrido virtual por la historia de Blackpool y una pasarela de cristal no apta para personas con vértigo. En su interior también se encuentran las atracciones del Tower Ballroom, Tower Circus, Tower Dungeon y Tower Eye.
  • Blackpool Pleasure Beach (1896): La icónica y fascinante imagen de una montaña rusa a lo largo de una playa. Éste histórico y pintoresco parque de atracciones tuvo la “Pepsi Max Big One”, que fue la montaña rusa con el recorrido más rápido y la más alta del mundo entre 1994 y 1996.
  • Stanley Park (1926): Uno de los principales parques históricos de Blackpool con un lago donde poder remar en pequeñas barcas, un pintoresco restaurante art deco y multitud de jardines.
  • Madame Tussauds (1929): El mundialmente conocido museo de cera que también se encuentra en las principales ciudades del mundo, lleva asentado en Blackpool casi un siglo. En su interior, lo típico: escenarios y experiencias interactivas que incluye Corrie’s Rovers Return, Marvel Super Heroes y Doctor Who.
  • Ice Arena (1937): Este es el teatro de hielo más antiguo del mundo y sede del Hot Ice Show. Aunque está abierto para el patinaje público todos los días, se realizan actuaciones y eventos artísticos a lo largo del año.
  • Blackpool Zoo (1972): Un zoológico que alberga a más de 1500 animales de todo el mundo, incluidos elefantes, camellos, tigres, leones y jirafas.
  • Model Village & Gardens (1972): En su interior hay un pueblo en miniatura al completo, con jardines y fuentes.
  • Sandcastle Water Park (1986): Este es el parque acuático cubierto más grande del Reino Unido, en su interior hay 18 toboganes y otras atracciones, incluido el tobogán acuático de montaña rusa interior más grande del mundo.
  • SEALIFE Blackpool (1990): Un gran acuario con tiburones, piscinas táctiles, experiencias de buceo y charlas informativas. También ofrece tours privados.
  • Ripley’s Believe It or Not! (1991): Un museo de curiosidades y récords, distribuido en dos plantas.
  • Pasaje Del Terror (1998): Una atracción de terror y acción en vivo, con actores y efectos especiales.
  • Alfombra de la comedia (2011): Un enorme área situada justo enfrente de la Torre de Blackpool donde se puede leer bromas y frases en el pavimento. La mejor vista es sin lugar a dudas desde lo alto de la torre.

DONDE ALOJARSE EN BLACKPOOL

En Blackpool hay alojamientos para todo tipo de viajeros y familia, tanto si viajas con amigos como con mascota como fue nuestro caso, como en familia. Bed & Breakfast, Hoteles boutique, apartamentos y hoteles de todo tipo de categorías.

Mi recomendación personal es quedarse en un hotel a lo largo del “Promedade” o paseo marítimo que además tenga aparcamiento si es que viajas con coche ya que aparcar en la calle es complicado, y los aparcamientos públicos son bastante caros si estás días completos.

Nosotros nos alojamos en el Hilton Brighton ya que su ubicación era buena para pasear por el paseo marítimo y además admitían mascotas, para nosotros perfecto yendo con Pau. Puedes reservar éste hotel AQUÍ.

CÓMO LLEGAR A BLACKPOOL

Primero de todo debes ser consciente de que es mejor visitar Blackpool en verano, con una temperatura promedio que sube a 16°C en los meses de julio y agosto. Sin embargo, esta es la temporada alta de turismo, por lo que la ciudad suele estar bastante llena y los precios pueden ser algo altos.

Blackpool cuenta con un aeropuerto, pero dejó de estar operativo en el año 2014, así que los visitantes internacionales pueden volar al aeropuerto de Liverpool o al aeropuerto de Manchester y desde allí tomar un tren o el autobús hasta Blackpool.

Verdaderamente no creo que para los viajeros no residentes en Reino Unido, Blackpool sea un destino final, por lo que yo recomendaría viajar hasta alguno de los aeropuertos mencionados arriba, alquilar un coche y hacer un viaje por toda esta pintoresca zona de Inglaterra e incluso cruzando al norte de Gales en busca de castillos y pintorescos pueblos.

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A medida que abandonas la ciudad y vuelves por la autopista M55, dejas atrás recuerdos de pintura descascarada, adivinos que no dan ni una y montones de patatas fritas pisadas por el suelo, realmente llegas a cuestionarte si realmente acabas de pasar unas vacaciones.

Es solo cuando vuelves a la rutina habitual en casa, cuando te das cuenta de que hay un lugar donde siempre eres bienvenido. Un lugar donde puedes ir para olvidarte y sentirte querido, un lugar que (aunquecasposo”) tiene una magia clásica que marca positivamente en los recuerdos, un lugar que, a pesar de todos sus defectos, nunca deja de hacerte sonreír.

Los cambios en los gustos, combinados con las oportunidades para que los británicos viajen al extranjero, afectaron el estado de Blackpool como un resort líder a fines del siglo XX. Sin embargo, el tejido urbano y la economía de Blackpool permanecen relativamente poco diversificados y firmemente arraigados en el sector turístico, y el paseo marítimo continúa atrayendo a millones de visitantes cada año.

Cuando la gente me pregunta sobre qué hacer en Blackpool, cuando a priori no parece interesante, yo les digo que si has estado antes sabrás por qué. Si no lo has hecho, debes ir a verlo por ti mismo. Nunca es demasiado tarde.

3 COMENTARIOS

  1. No he estado pero creo que me gustaría porque confieso que estos sitios decadentes me pueden, cuando he visto que había un Ripley´s lo he visto claro, jeje. Saludos viajeros

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